martes, 27 de mayo de 2014

cambios

Desde el rincón de la cama, donde todo parece igual, donde todo pareciera intacto, se da cuenta que cada centímetro de su cuerpo se ha modificado. Las células musculares más proteicas, cada pelito más largo y mas cabellos blancos, pies siempre cansados, neuronas con dendritas perdidas, un corazón latiendo más fuerte...y triste.

Todo cambió y ahora se pierde en su propia casa. Ya no sabe donde se esconden las medias. Ya no sabe donde está su imagen en el espejo. Ya no encuentra su otra parte del alma.
Las personas a su alrededor están mutando, hablan otro idioma, se ríen de cosas diferentes, visten ropas irreconocibles, comen comidas desconocidas. Y ya no encuentra su otra parte del alma.

Con tantos cambios, es difícil reconocerse, es casi imposible encontrarse su propia alma, ni hablar de su otra parte. Es por eso que, desde el rincón de la cama, decide cambiarse el nombre, tal vez así, no se pierda con tantos cambios.